
Durante las más de dos horas que ha durado su masterclass, Cristina Pardo ha tratado de grabar un mensaje claro en la mente de las participantes de STEM Talent Girl: “Podéis llegar donde os propongáis”. Consciente de que pueda parecer un mantra algo utópico, Pardo ha compartido las historias de superación más extremas con las que se ha encontrado durante su carrera para demostrar que, de verdad, “el límite lo ponemos cada uno”.

La coach y formadora cántabra es especialista en Talento, Liderazgo, Recursos Humanos y Equipo, con experiencia profesional en los campos del deporte, la terapia, la educación y la empresa. Tras más de dos décadas dedicándose “al desarrollo de las personas al máximo nivel de sus posibilidades”, hoy avalan su trayectoria distinciones internacionales como el Premio Mundial Joven de la Paz de la Unesco 2003 o el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia 1998.
Ante un público de casi 200 estudiantes de secundaria y bachiller académicamente brillantes -en un momento determinante para encarrilar su futuro profesional- Pardo ha dejado claro que, frente a los sueños, “no nos valen las excusas”.
Ha explicado que nada debe frenarnos ante aquello que nos haga realmente felices, con especial hincapié en las inseguridades interiorizadas por el hecho de ser mujeres, como brillar en terrenos tradicionalmente “masculinos” como el deporte, las finanzas o la tecnología.

“Esa barrera la han encontrado nuestras madres y nuestras abuelas, pero hoy no podemos permitirlo,” ha afirmado. “Cuando tú eres buena, cuando lo haces bien, te esfuerzas y das lo mejor de ti: no hay competencia”. Menos aún, ha señalado, cuando se tiene un punto de partida privilegiado como el suyo, “en un momento, un país y un programa educativo en el que se os está dando todo”.
Las asistentes han podido conocer historias tan sorprendentes como inspiradoras. El caso de un grupo de niñas sin escolarizar y malnutridas, de un suburbio de la ciudad boliviana de Santa Cruz de la Sierra, que en unos años logró competir en gimnasia rítmica a nivel internacional; un joven con discapacidad, de esa misma localidad, que logró ser campeón olímpico en atletismo; o un niño de Texas de familia humilde que primero cumplió su sueño de ser astronauta y cuando se jubiló, a los 50, sacó la carrera de medicina para poder ayudar a luchar contra la malnutrición.
Adaptación a la crisis sanitaria
Cristina Pardo ha sido optimista también respecto a la situación de confinamiento actual. “Todos los momentos de cambio sirven de alguna manera como momentos de parada, de pensar lo que queremos hacer”. En ese sentido, ha animado a las chicas a aprovechar este impás para reflexionar sobre lo que les hace felices, confiar en sí mismas y “ser conscientes de que lo que hagáis con vuestra vida va a tener un impacto en otras personas”.
Pardo, colaboradora habitual de la Asociación Mujer y Talento con gran implicación en sus actividades, se estrenaba esta semana como ponente en el programa STEM Talent Girl, en lo que iba a ser una conferencia en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Santander. Debido precisamente a la crisis sanitaria, el acto se ha trasladado al formato digital, lo que ha dado la posibilidad de abrir la masterclass al resto de alumnas de STEM Talent Girl en las otras 10 sedes a nivel nacional.
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